La instalación de iluminación de un jardín, para crear un ambiente deseado en una celebración. Depende de muchos factores que debemos de tener en cuenta. Para ello debemos hacer previamente un estudio del lugar, además de tener un buen conocimiento de los distintos tipos de luminarias y considerar el tipo de vegetación de que disponemos. Incluso la estación en la que nos encontremos es muy importante, pues las sensaciones podrán variar mucho con los distintos tonos y temperaturas de color elegidas para cada espacio que debemos iluminar.
Debemos tener siempre presente que la iluminación del jardín debe ser sutil. La atención debe ser protagonizada en las plantas, setos, árboles o esculturas, pero no por las luminarias. Para ello la instalación de los focos en jardines será siempre de forma indirecta, en caso de que queramos crear ambientes acogedores que inviten a la armonía y a la magia.
No hay que olvidar que una iluminación directa, además de deslumbrar, proporcionará sombras en las fotografías. Y aunque las sombras en este tipo de trabajos juegan un papel esencial ,el exceso de luz puede provocar deslumbramientos, tanto para los invitados, como para las cámaras.
Disponer de una persona con gran experiencia en iluminación, conocedor de los distintos tipos de luminarias que ofrece el mercado, al igual que sus formas de comportarse estas con la luz en los distintos tipos de ambientes, puede ser el éxito para conseguir un ambiente que fascine e invite al disfrute suyo y de sus invitados. En el caso de una celebración. La combinación de focos con guirnaldas, es muy utilizada en este tipo de iluminaciones para embellecer nuestro jardín.
Tratar de expandir espacios o limitarlos, será parte del trabajo bien realizado hacia el exterior en la noche.
Este tipo de instalaciones en el modo de alquiler para celebraciones puntuales, son siempre la opción más acertada, pues podemos disfrutar de una espectacular iluminación de jardín en un día señalado desde presupuestos muy reducidos, que se adaptan a cada tipo de cliente.